lunes, 16 de julio de 2012

Día redondo


Hay días que son redondos, aunque no desayunes un donut. Porque hay días, que cualquier cosa te puede inspirar y, de repente, sucede la magia... algo que no tenía utilidad, se convierte en un fácil y sencillo DIY como este que os contamos a continuación.

Este es el caso de la reencarnación de unos separadores en forma de aros de cartón que venían en un set de cuencos del IKEA. Su destino, os imagináis cuál era. Pero, aquí, la imaginación les salvó de una muerte segura y ahora tienen otra vida con esta idea.

Con los aros por un lado (que en su caso puede ser cualquier cilindro de cartón, que se corte en aros) y unos cuantos metros de hilo, el milagro se produjo y se convirtieron en unos simpáticos servilleteros.

La obra, fue muy sencilla: forrar con el hilo (aunque también pueden valer tiras de tela, washi tape, lana u otro material) los aros, envolviendo el cartón con pasadas muy apretaditas y pegar el inicio y fin con pegamento. Para disimularlo, utilizamos estas mariposas (del PRIMARK), que le dan, además, un toque decorativo. ¡Y servilleteros listos!

Los separadores que venían entre los cuencos, y que estaban destinados a la basura...
El hilo que les ayudó a tener una nueva vida

Y el resultado final...

Las mariposas les dan el toque decorativo.


Un día redondo...

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